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¿De dónde viene el día de San Valentín?

En este día tan especial festejamos a nuestros seres queridos con regalos y tarjetas de amor. Las ventas de rosas rojas, chocolates y ositos de peluche renuevan sus récords, pero ¿alguna vez te has preguntado de dónde viene realmente San Valentín? En adopte decidimos explorar este tema. Te aseguramos que esta fecha tiene raíces mucho más profundas de lo que pensabas...

Orígenes paganos

Aunque hoy en día muchos asocian San Valentín con Estados Unidos, sus orígenes se remontan a Europa. Todo empezó en la antigua Roma. El 14 de febrero se celebraba la víspera de la Lupercalia en honor del dios de la fertilidad, Fauno. Se organizaba entonces una ostentosa fiesta. En ella, los jóvenes echaban a suertes los nombres de las chicas con las que bailarían el resto de la velada y, posiblemente, el resto de sus vidas. La fiesta fue muy popular hasta el siglo V. Hasta que el Papa Gelasio I la sustituyó por una fiesta litúrgica en honor del mártir y patrón del amor, San Valentín.

La desconocida historia de San Valentín

Cuando el emperador romano Claudio II el Gótico prohibió a los hombres casarse (para persuadirlos de que participaran así en las guerras), Valentín debía realizar votos secretos. Sin embargo, fue capturado y ejecutado. Antes de su ejecución, mientras estaba en prisión, se enamoró de la hija ciega de un guardia. Cuenta la leyenda que la fuerza de su amor le devolvió la vista a ella. Resulta que hasta las historias de santos pueden tener un toque romántico.

En un plano más íntimo

Aunque al principio San Valentín se celebraba en forma de ceremonias eclesiásticas, muy pronto adquirió un carácter laico y mucho más romántico. El Día de San Valentín volvió a cobrar importancia gracias a los británicos y franceses a finales de los siglos XVII y XVIII. En aquella época, los enamorados enviaban cartas de amor decoradas a sus amadas. Algunas de ellas tenían una forma elevada y descaradamente poética, otras eran eróticas, llenas de palabras intimidantes para los estándares contemporáneos. Cabe decir que así ha permanecido hasta nuestros días.

Cada país tiene sus propias costumbres

Curiosamente, no en toda Europa ni en todo el mundo se celebra el 14 de febrero. Tampoco se celebra de la misma manera en todas partes. Por ejemplo, en Barcelona y en toda Cataluña, las parejas celebran su amor el 23 de abril, cuando se celebra la Diada de Sant Jordi. Este día festivo también se conoce como El Día de la Rosa y el libro, y el acto principal es el intercambio de regalos, normalmente rosas y libros.

Los brasileños, por su parte, celebran el Día de los Enamorados, conocido como Dia dos Namorados, el 12 de junio, y lo festejan al igual que Europa y el resto del mundo el 14 de febrero. En Bulgaria, por su parte, ese día se celebra el Día del Vino. En otros países, la fiesta tiene lugar varias veces al año; en República Checa, los enamorados celebran el amor en febrero y también el 1 de mayo.

Recuerda que, independientemente del día o la latitud, lo más importante es celebrar y practicar sinceramente el amor por tu amado, tus amigos, pero también (y especialmente) ¡por ti mismo! Así que no nos queda más que desearte que la fuerza del amor te acompañe.

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